APRENDER A VIVIR

«Aprender a vivir con sobriedad»

. Mejor es vivir ligero de ropa pero feliz, que
que pasar la vida sin saber qué elegir entre todo
el vestuario que se tiene.

. No quieras vivir para ganar dinero.
Ojalá quisieras vivir para agradecer el
don de la vida.
Para devolver a la vida el regalo que te ha dado.

. No suele faltar dinero.
Sí falta saber cómo se «puede» ganar que siempre
es por el buen trabajo.
Y sobre todo, cómo se «debe» o no se debe gastar.

. El hombre necesita volver a la naturalidad, nece-
sita resistirse a cualquier forma de artificial.
El hombre de hoy necesita volver a un mundo de
sencillez y de inocencia.
Las formas artificiales de vida, hacen al hombre
cada día más complicado y malicioso.

. En nuestro siglo, sobran palabras y sobran ense-
ñanzas.
Es mejor para ti, escuchar  que hablar, aprender
que enseñar, actuar y juzgar.

. Pedí riqueza, para poder ser feliz.
Y se me dio pobreza, para que pudiera ser sabio.
Después encontré la felicidad.

. La abundancia de dinero, es un mal peor que andar
con cierta falta de él.
Es frecuente que el que tiene mucho dinero en el bol-
sillo, no tenga nada más que esto.
Y «esto» es tener muy poco.

. Ser «rico» no es igual que tener dinero.
Hay muchos «ricos» sin dinero, y hay muchos con
dinero que son completamente «pobres».
La lástima es uqe las personas no solemos preferir
la «riqueza» que no va pegada al dinero.

. Si te sientes agobiado, des cárgate  del  lastre inútil
que llevas contigo.
Empieza por renunciar a muchas ambiciones super-
fluas que no necesitas para vivir.
Y verás cómo te sientes mejor.

 

«YA SEIS AÑOS»

800.
CUMPLEAÑOS

Hoy hace seis años que inicie un largo
y complicado camino y los invite a que
visitaran mi web tesyangelical.com
Pues la verdad que me siento satisfecha
por la labor emprendida.
Y doy gracias a Dios y a todos los amig@s
que fui cosechando por este medio.
A todos que comparten un pedasito de historias,
poesías y pensamientos sin ellos no llegaríamos
tan lejos estos «seis años».
Bendiciones, Namaste

 

«Obediencia»

PENSAR Y VIVIR EN LIBERTAD

«Porque he bajado del cielo, no para hacer mi
voluntad, sino la voluntad de aquél que me envió»

Cuando absolutista la autoridad de un hombre,
enajenas tu autonomía.

Tú eres el último responsable por haber hecho lo
que te ordenaron.

El valor de tu obediencia no está en tu sumisión,
sino en tu amor y en tu libertad.

Cuando los hombres te alaben por obediente,
pregúntate si no te están acusando de servil e
irresponsable

Superior autoritario y súbdito sumiso son dos
personas enfermas.

Si de veras quieres obedecer a Dios, acepta algo
que es del todo claro e indiscutible: sé libre y
responsable de ti mismo.

Obedecer ciegamente es renunciar a hacerte respon-
sable de tus acciones.

La obediencia no es un valor en sí misma. Si por
obediencia cometes un crimen eres un criminal, y si
por obediencia haces estupideces… no eres un santo.