Cuando usamos nuestra capacidad de nutrir,
de apoyar, de aceptar y de servir, estamos
ejercitando la actitud maternal. La actitud
maternal libera nuestros talentos para mani-
festar sentimientos de compartir, de compa-
ñerismo, de solidaridad, y de ayuda a disolver
bloqueos causados por la dominación excesi-
va y unilateral. El aspecto maternal dentro de
nosotros va a apoyar incondicionalmente a
todo Ser, cosa o proceso que necesite fuerza y
nutrición para crecer. Esta actitud crea espacio
para acoger nuestras mejores expectativas, al
mismo tiempo que se empeña amorosamente
para que todo pueda venir a la luz.
Sugerencias prácticas para una
actitud Maternal:
. Lo maternal de nosotros es naturalmente
modesto y libre de compulsiones.
¡Deleita te más con lo que haces.
. Trata de sentir los momentos en que te entregas
para dar y recibir.
Ve más allá del dar y del recibir y concéntrate en
la «energía»
. Observa si estás consiente de la diferencia entre
principios y procesos. La actitud maternal com-
prende el principio, pero se entrega al proseso
de ver nacer alguna cosa.
. Cuida tu casa, tu ropa, tus utensilios. Sé un buen
guardián de las dádivas de la Madre Tierra para ti.